Durante el acto de curación, el sanador trasciende lo humano, el Yo emerge y participa con Dios en la danza Divina. Para sanar se debe seguir el deseo de querer servir. El deseo es la llave, úselo para abrir las puertas interiores y permitir que el poder sanador de Dios fluya. La curación es el plan de vida porque la curación es el proceso de renovación.
Par dar acceso a la energía divina y convertirse en canal se debe aprender a contemplar, luego a recordar quién es usted y finalmente recolectar quién es su propio yo. La curación es en esencia la apertura de canales. Cuando el poder de curación divina inunda al ser, se puede ser sanado. Cuando esta energía espiritual o (“prana” término utilizado e sánscrito) se enfoca hacia otra persona, entonces usted actúa como canal de curación. Este es el proceso de la transmutación de energía. La energía que viene del plano espiritual entra al espíritu y allí es transmutada. Luego entra a la mente (el plano mental), después a las emociones (el plano etérico) y desde allí fluye al cuerpo físico. Este proceso es un proceso natural que ocurre todo el tiempo en los seres humanos saludables. Para entender como el sanador transforma la enfermedad en salud, debe comprender que el ser humano es mucho más de lo que se imagina, cuando se ha comprendido que el Universo es más que la existencia material se comienza a integrar la conciencia y las mitades inconscientes, se experimentará la realidad del verdadero ser y se verá que no sólo se es una existencia física. El ser humano no está confirmado a experimentar el mundo sólo a través de los sentidos. Cada parte del ser es una multidimensión que funciona simultáneamente en todos los planos, el ser se expresa, influye y es influido en cada dimensión. Integrar las cuatro naturalezas: la espiritual, mental, emocional, y física es lo que llamamos recordar. Experimentar mientras se existe en todos los niveles, puede ayudar a interceptar las fuentes energéticas incluso de un plano más alto, el espiritual y luego usar estas energías en todos los planos para sanar. El amor es un ingrediente esencial para la curación, es la fuerza que empuja a la persona a buscar un vínculo con algo o alguien.
