martes, 25 de noviembre de 2008

Un Curso de Milagros "Libro de Ejercicios del 81 al 100"


Repaso 81 : 1)"Yo soy la luz del mundo" ¡Qué santo soy, que se me ha encomendado la función de iluminar el mundo! Séame concedido poder permanecer en quietud ante mi santidad. Que en su serena luz, desaparezcan todos mis conflictos, y que en su paz pueda recordar quién soy.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "No nublaré la luz del mundo en mí" "Que la luz del mundo resplandezca a través de esta apariencia" "Esta sombra desaparecerá ante la luz"
2) "Perdonar es mi función por ser la luz del mundo."
Sólo aceptando mi función podré ver la luz del mundo en mí. Esta aceptación no depende de que yo reconozca lo que mi función es, porque aún no comprendo lo que es el perdón. Pero confío en que en la luz lo veré tal como es.
Variaciones específicas: "Que esto me ayude a aprender el significado del perdón" "No dejes que separe mi función de mi voluntad" "No me valdré de esto para apoyar un propósito ajeno a mí"

Repaso 82 : 1)"La luz del mundo le brinda paz a todas las mentes a través de mi perdón" Mi perdón es el medio por el que la luz del mundo se expresa a través mío; por el que cobro conciencia de la luz del mundo en mí. Es el medio por el que el mundo sana, junto conmigo. Permítaseme perdonar al mundo, para que pueda sanar junto conmigo.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "Que la paz se extienda de mi mente a la tuya, (nombre)" "Comparto la luz del mundo con vos, (nombre) " "Mediante mi perdón puedo ver èsto tal cual es"
2) "No dejes que me olvide de mi función."
No me olvidaré de mi función porque quiero recordar mi Ser. No puedo desempeñar mi función si la olvido, y a menos que la desempeñe, no experimentaré la dicha que Dios dispone que yo tenga.
Variaciones específicas : "No me valdré de ésto para ocultarme a mí mismo mi función" "Me valdré de ésto para desempeñar mi función" "Esto podrá ser una amenaza para mi ego, pero no puede alterar mi función".

Repaso 83 : 1)"Mi única función es la que Dios me dio." No tengo otra función salvo la que Dios me dio. Reconocerlo me libera de todo conflicto; significa que no puedo tener metas conflictivas. Al tener sólo un propósito, siempre estoy segura de lo que debo hacer, de lo que debo decir y pensar. Al reconocerlo, toda duda desaparece.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "Mi percepción de ésto no altera mi función." "Esto no me confiere una función distinta a la que Dios me dio" "No me valdré de ésto para justificar una función que Dios no me dio."
2) "Mi función y mi felicidad son una."
Todas las cosas que proceden de Dios son una; proceden de la Unicidad (que significa la calidad, estado o hecho de ser uno) y tienen que ser recibidas como una sola. Desempeñar mi función es mi felicidad, porque ambas proceden de la misma Fuente.
Variaciones específicas: "Esto no puede separar mi felicidad de mi función" "La unidad que existe entre mi felicidad y mi función no se ve afectada por esto" "Nada, incluido esto, puede justificar la ilusión de que puedo ser feliz si dejo de cumplir mi función".

Repaso 84 : 1)"El Amor me creó a semejanza de sí mismo." Fui creado a semejanza de mi Creador. No puedo sufrir, ni experimentar pérdidas, ni morir. No soy un cuerpo. Hoy quiero reconocer mi realidad, no adoraré ídolos ni exaltaré el concepto que forjé de mí mismo para reemplazar a mi Ser. El Amor me creó a semejanza de sí mismo.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "No me dejes ver en ésto una ilusión de mí mismo." "Mientras contemplo ésto, quiero recordar a mi Creador" "Mi Creador no creó ésto como yo lo estoy viendo."
2) "El amor no abriga resentimientos."
Los resentimientos son completamente ajenos al amor; lo atacan y oscurecen su luz. Si abrigo resentimientos, estoy atacando al amor y por ende, atacando a mi Ser. Así, mi Ser se vuelve extraño a mí. Por eso, estoy decidida a no atacar a mi Ser hoy, de manera que pueda recordar Quién soy.
Variaciones específicas: "Ésto no justifica que niegue a mi Ser" "No me valdré de ésto para atacar al amor" "No dejaré que ésto me tiente a atacarme a mí mismo".

Repaso 85 : 1)"Mis resentimientos ocultan la luz del mundo en mí."

Mis resentimientos me muestran lo que no está ahí, y me ocultan lo que quiero ver. Luego de reconocer ésto, ¿para qué los quiero? Me mantienen en la oscuridad, y ocultan la luz, ya que los resentimientos y la luz no pueden coexistir; pero la luz y la visión tienen que unirse para que yo pueda ver. Y para ver, tengo que desprenderme de mis resentimientos.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "No permitas que haga de ésto un obstáculo a la visión." "La luz del mundo desvanecerá todo esto con su resplandor" "No tengo necesidad de ésto. Lo que quiero es ver."
2) "Mi salvación procede de mí."
Hoy reconoceré dónde está mi salvación. Está en mí porque ahí es donde está su Fuente, y no la ha abandonado, por ello no pudo haber abandonado mi mente. Dejaré de buscarla fuera de mi mismo. Se extenderá desde dentro de mí y todo lo que vea no hará sino reflejar la luz que brilla en mí y en sí mismo.
Variaciones específicas: "Ésto no puede privarme de la salvación" "No dejaré que ésto me tiente a buscar la salvación fuera de mí mismo" "No permitiré que ésto interfiera en la conciencia que tengo de la Fuente de mi salvación".

Repaso 86 : 1)"Sólo el Plan de Dios para la salvación tendrá éxito."

Es inútil andar buscando la salvación en cualquier parte. Muchas veces creí verla en personas y cosas, pero estaba equivocada con respecto a dónde se encuentra, y a lo que es. Ya no emprenderé búsquedas inútiles. Sólo el plan de Dios para la salvación tendrá éxito, y me regocijaré porque su Plan no puede fallar.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "el plan de Dios para la salvación me librará de mi percepción de ésto." "Esto no es una excepción al plan de Dios para la salvación" "Quiero percibir ésto a la luz del plan de Dios para la salvación"
2) "Abrigar resentimientos es un ataque para el plan de Dios para la salvación."
Al abrigar resentimientos, estoy excluyendo de mi conciencia mi única esperanza de salvación. Pero no quiero seguir yendo contra mis propios intereses de esta manera descabellada. Quiero aceptar el Plan de Dios para la salvación y ser feliz.
Variaciones específicas: "Según contemple ésto estoy eligiendo entre la percepción falsa y la salvación" "Si veo en ésto motivos par abrigar resentimientos, no veré motivos que justifiquen mi salvación" "Esto es un llamamiento a la salvación, no al ataque".

Repaso 87 : 1)"Mi voluntad es que haya luz." Hoy usaré el poder de mi voluntad. No es mi voluntad andar a tientas en la oscuridad temeroso de las sombras y amedrentado por cosas irreales. La luz será mi guía hoy; la seguiré y contemplaré lo que me muestre. Experimentaré la paz de la verdadera percepción.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "Esto no puede ocultar la luz que es mi voluntad ver" "(nombre), estás en la luz junto conmigo" "En la luz, esto se ve de otra manera"
2) "No hay más voluntad que la de Dios."
Estoy a salvo hoy, porque No hay más voluntad que la de Dios; temo sólo cuando creo que hay otra voluntad. Trato de atacar cuando tengo miedo, y sólo cuando trato de atacar creo estar amenazado. Hoy reconoceré que nada de esto es real.
Variaciones específicas: "Permítaseme percibir ésto de acuerdo con la voluntad de Dios "La voluntad de Dios, así como la mía, es que vos, xx, seas Su Hijo" "Esto es parte de lo que la voluntad de Dios dispuso para mí, independientemente de como lo vea yo".

Repaso 88 : 1)"La luz ha llegado." Al elegir la salvación en vez del ataque estoy eligiendo reconocer lo que ya está allí. La salvación es una decisión que ya se tomó; ataque y resentimientos no existen como opciones. La luz ha llegado. Solamente puedo elegir la luz porque no hay otra opción. La luz reemplazó a la oscuridad, que ha desaparecido.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "Esto no puede mostrarme la oscuridad, porque La luz ha llegado." "Tu luz, (nombre) es lo único que quiero ver"
2) "No me gobiernan otras leyes que las de Dios."
Esta es la perfecta declaración de libertad. La tentación de inventar otras leyes y permitir que me subyuguen acecha, y sufro únicamente porque creo en ellas; pero en realidad, no me afectan en absoluto. Estoy a salvo de los efectos de cualquier ley, excepto las de Dios, y Sus leyes son las de la libertad.
Variaciones específicas: "Veo únicamente las leyes de Dios operando en ésto" "Permítaseme dejar que las leyes de Dios actúen en esto y no las mías".

Repaso 89 : 1)"Tengo derecho a los milagros." Esto es porque no me gobiernan otras leyes que las de Dios; ellas me liberan del resentimiento y lo reemplazan con milagros. Acepto los milagros en vez de los resentimientos, que no son sino ilusiones que ocultan los milagros que están detrás de los resentimientos. Acepto ahora aquello a lo que las leyes de Dios me dan derecho, para usarlo en beneficio de la función que Dios me dio.
Variaciones específicas para aplicar la idea: "Detrás de esto hay un milagro al que tengo derecho." "No voy a abrigar resentimiento contra vos, (nombre), sino que te voy a ofrecer el milagro al que tenés derecho" "Visto correctamente, ésto me ofrece un milagro"
2) "¡Que los milagros reemplacen todos mi resentimientos!"
Con esta idea, mi voluntad se une a la del Espíritu Santo y percibo ambas como una. Así acepto mi liberación del infierno, y expreso que deseo que mis ilusiones sean reemplazadas por la Verdad, de acuerdo al Plan de Dios para la salvación.
Variaciones específicas: "(nombre), dejemos que los milagros reemplacen nuestros resentimientos" "Detrás de ésto se encuentra el milagro que reemplaza todos mis resentimientos".

Repaso 90 : 1)"Permítaseme reconocer el problema para que pueda ser resuelto."
Hoy quiero ver que el problema siempre es alguna forma de resentimiento. Quiero comprender que la solución es siempre un milagro al que le permito ocupar el lugar del resentimiento. Hoy quiero recordar la simplicidad de la salvación, recordando que sólo hay un problema, (un resentimiento) y una solución, (un milagro). E invito a la solución cuando perdono la causa del resentimiento y le doy la bienvenida al milagro que ocupa su lugar
Variaciones específicas para aplicar la idea: "Esto supone un problema para mí, que quiero que se resuelva." "El milagro que está detrás de este resentimiento, lo resolverá por mí" "La solución a este problema es el milagro que este problema oculta"
2) "Permítaseme reconocer que estos problemas se han resuelto."
La única razón por la que creo tener problemas, es que uso el tiempo indebidamente, creyendo que primero ocurre el problema y luego debe resolverse. No veo el problema y la solución como acontecimientos simultáneos, porque aún no me di cuenta de que Dios ubicó la solución junto al problema, y el tiempo no los puede separar. El Espíritu Santo me lo mostrará si se lo permito.
Variaciones específicas: "No tengo que esperar a que esto se resuelva" "La solución a este problema ya se me dio, si estoy dispuesto a aceptarla" "El tiempo no puede separar este problema de su solución".

Finalizado el repaso, volvemos a las lecciones.
Lección 91 : "Los milagros se ven en la luz"
Es importante reconocer que los milagros y la visión van de la mano. El milagro está siempre allí, no importa que los percibas o no. Los verás en la luz, y no en la oscuridad. Por eso, la luz es crucial; en la oscuridad no podés ver el milagro, y creés que no existe. Esto mismo es para la luz: no percibir la luz, es percibir la oscuridad, y la aparente realidad de la oscuridad, hace que la idea de la luz no tenga sentido. Si te dijeran que lo que no ves está ahí, no lo creerías. Sólo creés en lo que ven los ojos del cuerpo. Para invertir esta percepción, estás respaldado por una fortaleza que hará desaparecer tus dudas y que vive en vos. Hoy trataremos de sentir esa fortaleza.
Sesiones largas: 3 veces en el día, por 10 minutos, tratá de dejar atrás tu debilidad. Se logra si te das instrucciones a vos mismo de ser algo más que un cuerpo. Podés escaparte del cuerpo si lo decidís; podés experimentar la fortaleza que vive en vos. Comenzá diciendo: "Los milagros se ven en la luz. Los ojos del cuerpo no perciben la luz. Mas yo no soy un cuerpo. ¿qué soy entonces?" Esta pregunta es crucial. Lo que pensás que sos debe ser erradicado para que lo que realmente sos te sea revelado. La verdad de lo que sos apela a la fortaleza que vive en vos, para llevar tu conciencia más allá de lo que el error oculta. Y con cada atributo que venga a tu mente, enunciá los opuestos que ocuparán su lugar. Por ej: "No soy débil, sino fuerte. No soy un inútil, sino todopoderoso. No tengo dudas, sino seguridad", etc. terminando con "No puedo ver en la oscuridad, sino en la luz".
Luego, tratá de experimentar estos enunciados que hiciste. La debilidad está asociada a la idea de que sos un cuerpo. Luego, sólo relajate por el resto de la sesión.
Sesiones cortas: 5 ó 6 veces por hora, recordate que los milagros se ven en la luz. Ante una tentación, repetite: "Los milagros se ven en la luz. No cerraré los ojos por causa de ésto"

Lección 92 : "Los milagros se ven en la luz, y la luz y la fortaleza son una"
Esta idea es una ampliación de la de ayer. Trataremos de asociar la luz con la fortaleza, y la debilidad con la oscuridad. Ahora creés que ver es usar los ojos del cuerpo; creés que el cerebro puede pensar. Pero la fortaleza de Dios que vive en vos es la luz en la que ves, y es Su mente con la que pensás. Su fortaleza niega tu debilidad, y es tu debilidad lo que ves con los ojos del cuerpo. La debilidad ve todo como diferente a sí misma; juzga, condena y no ama, permaneciendo en la oscuridad para ocultarse. Se teme, se ataca y se odia a sí misma. La fortaleza pasa la debilidad por alto, al mirar más allá de las apariencias; te brinda la luz en la que tu Ser aparece. La fortaleza procede de la Verdad, y brilla con la luz que su Fuente le otorgó. La fortaleza y la luz se unen en vos, y ahí donde se unen, tu Ser se alza para recibirte como Suyo.
Allí trataremos de llegar hoy.
Sesiones largas: 2 veces, por 20 minutos (a la mañana y a la noche) estemos presentes en ese encuentro. Dejate conducir ante tu Ser. Dejá la oscuridad, y practicá ver en la luz, cerrando los ojos del cuerpo y pidiendo hallar el encuentro entre tu ser y tu Ser, donde la luz y la fortaleza son una.
Sesiones cortas: repitamos la idea de hoy tan a menudo como sea posible, reconociendo que es el preludio de la visión, y que nos está llevando de la oscuridad a la luz donde pueden percibirse los milagros.

Lección 93 : "La luz, la dicha y la paz moran en mí"
Creés ser morada del mal, y que si alguien viese la verdad acerca tuyo, te odiaría. Esta creencia está arraigada pero no tiene fundamento. Que cometiste errores es obvio; pero hoy vamos a poner en tela de juicio esta sentencia. Estos pensamientos no concuerdan con la voluntad de Dios. Todo el mal que creés haber hecho, nunca ocurrió; tus pecados no son nada, porque seguís tan puro como fuiste creado. El ser que vos fabricaste no es ni bueno ni malo; al no ser el Hijo de Dios, es irreal, por tanto, no existe. Tu impecabilidad está garantizada por Dios, y la luz, la dicha y la paz moran en vos, porque ahí las puso Dios. La salvación requiere aceptar este pensamiento: sos tal como Dios te creó.
Sesiones largas: Por 5 minutos al comienzo de cada hora, comenzá repitiendo esta verdad: "La luz, la dicha y la paz moran en mí. Mi impecabilidad está garantizada por Dios". Pasá el resto de la sesión tratando de experimentar lo que Dios te ha dado, en lugar de lo que vos decretaste para vos. Tratá de experimentar la santidad de tu único Ser, y el Amor del que fue creado.
Aún cuando no puedas dedicarle 5 minutos, repetí estos pensamientos cada hora. Luego, dedicale 1 minuto con ojos cerrados para tomar conciencia de que son la verdad acerca tuyo.
Aplicalo también ante cada situación que parezca perturbarte.

Lección 94 : "Soy tal como Dios me creó"
Esta idea silencia al ego, y nos brinda la total salvación. Con esta idea se restaura la cordura. Sos tal como Dios te creó, por lo tanto tenés que ser fuerte, lleno de luz e impecable. Las tinieblas no pueden ensombrecer la gloria del Hijo de Dios.
Sesiones largas: Hoy volvemos a dedicar los primeros 5 minutos al comienzo de cada hora, a intentar sentir la verdad que está en nosotros: "Soy tal como Dios me creó. Soy su hijo eternamente". Tratá ahora de llegar al Hijo de Dios en vos, al Ser que jamás pecó, ni abandonó la morada de Dios. Sólo se te pide ir más allá de los atributos (buenos o malos) que te hayas adjudicado, y aguardar la verdad con expectación.
Si no cumplís con dedicarle 5 minutos, al menos repetí estos pensamientos cada hora.
Sesiones cortas: Repeti hoy frecuentemente que sos tal como Dios te creó. Y a cualquier persona que parezca irritarte, respondele: "Sos tal como Dios te creó. Sos Su Hijo eternamente."
Intentá cumplir los ejercicios 1 vez por hora. Cada sesión es un paso gigantesco hacia tu liberación.

Lección 95 : "Soy un sólo Ser, unido a mi Creador"
Esta idea te describe tal como Dios te creó. Sos uno con vos mismo, y uno con Él. Tu perfecta unidad hace que cualquier cambio en vos sea imposible. Creés ser algo fraccionado y dividido en muchas partes conflictivas, que a duras penas se mantienen unidas. Pero hoy trataremos de ser conscientes de lo que puede oír y ver y tiene sentido: trataremos de llegar hasta tu único Ser.
Sesiones largas: Dedicar los primeros 5 minutos al comienzo de cada hora a practicar esta idea te ofrece grandes ventajas: los períodos más largos hacen muy difícil evitar que te disperses. Además, a no ser que se nos recuerde frecuentemente nuestro propósito, tendemos a olvidarlo; traerlo a la mente 1 vez por hora, forma el hábito de usar la idea como respuesta a cualquier tentación.
Por ello, continuaremos con esta forma de práctica de 5 minutos por hora por algún tiempo. Se te exhorta a omitir las menos posibles. Pero no sientas el día como perdido si te olvidás; simplemente, reafirmá tu propósito volviendo al horario preestablecido . Estemos dispuestos a perdonarnos a nosotros mismos cualquier desviación. Esta tolerancia con la debilidad nos permite pasarla por alto, en vez de otorgarle el poder de demorar nuestro aprendizaje. Es sólo un error; y un error sólo requiere ser corregido. Son sólo intentos del ego de mantenerte lejos de tu Ser. Sos un sólo Ser unido a tu Creador, uno con cada aspecto de la Creación, dotado de paz y poder infinito.
Comenzá la sesión diciéndote con gran certeza: "Soy un sólo Ser unido a mi Creador, uno con cada aspecto de la Creación, dotado de paz y poder infinitos." Luego, cerrá los ojos y repetilo para vos varias veces, tratando de experimentar las palabras.
Se necesita nuestra ayuda, nuestra intención para brindar felicidad a todo el mundo. Dios nos contempla, sabiendo que vamos a intentarlo. Compartí su certeza, mantenete alerta. No te olvides.
Sesiones cortas: repetí la idea de hoy tan a menudo como puedas, sabiendo que cada vez que lo hacés tu reconocimiento es un llamado al mundo a ser uno con vos. Y cuando te encotrés con alguien, decile silenciosamente: "Vos y yo somos un sólo Ser unidos a nuestro Creador en este Ser. Te honro en razón de lo que soy, y de lo que es Aquel que nos ama a ambos como uno solo"

Lección 96 : "La Salvación procede de mi único Ser"
Aunque sos un sólo Ser, te percibís como dos: bueno y malo, amor y odio, mente y cuerpo. Esta sensación de división en opuestos genera conflicto. Pero no podés conciliar los opuestos que percibís en vos, porque sólo uno de ellos es real; sólo uno existe.
La mente es el medio del que el espíritu se vale para expresarse a Sí mismo; y si le sirve, está en paz y llena de gozo. Pero si la mente se percibe a sí misma como un cuerpo al que confunde consigo, divorciada del espíritu, no tiene paz y es infeliz. Desasociada de su función, cree estar sola y separada. No pierdas más tiempo en esto. Tu Ser aún conserva Sus pensamientos, dentro de tu mente y en la Mente de Dios. Hoy intentaremos localizar este pensamiento.
Sesiones largas: Los primeros 5 minutos al comienzo de cada hora los dedicaremos a buscar este Ser en tu mente. Comenzá diciendo: "La Salvación procede de mi único Ser. Sus pensamientos están a mi disposición". Luego, escuchá Sus pensamientos y reclamalos como tuyos. Sentirás a tu Ser, y la paz que emana de él. Tu mente bendecirá todas las cosas.
Cada vez que dedicás 5 minutos de cada hora a buscar a Aquel que une tu mente con tu Ser, le brindás un tesoro adicional para que lo cuide para vos.

Lección 97 : "Soy espíritu"
Esta idea te identifica con tu único Ser, no acepta una identidad dividida; simplemente, declara la Verdad. Vos sos el espíritu que completa a Dios Mismo y que comparte con Él Su función de Creador. Él está siempre con vos, así como vos estás con Él.
Cada vez que practicás te volvés más consciente. Los minutos que dedicás se multiplican, porque el milagro hace uso del tiempo, pero no está regido por él. Un minuto que se dedica a estas ideas, se convierte en un lapso de tiempo ilimitado e infinito.
Sesiones largas: El Espíritu Santo se regocijará de tomar los primeros 5 minutos de cada hora para llevarlos a este mundo afligido donde el dolor parece reinar. Así, cada ofrenda se multiplica miles de veces. Comenzá diciendo: "Espíritu soy, un Santo Hijo de Dios, libre de toda limitación, a salvo, sano y pleno. Libre para perdonar y libre para salvar al mundo". El Espíritu Santo aceptará este regalo que le brindás y te lo devolverá multiplicado. Ofrecele gustosamente cada sesión de práctica de hoy.

Lección 98 : "Aceptaré el papel que me corresponde en el Plan de Dios para la Salvación" Hoy es un día especial: nos pondremos de parte de la verdad, abandonando las ilusiones. Adoptaremos una postura firme en favor de Dios. ¡Qué dicha tener certeza! Dejemos de lado las dudas, afianzándonos en nuestra postura, seguros de nuestro propósito, agradecidos de que las dudas hayan desaparecido y la certeza nos cubra. Tenemos una función que desempeñar (aunque la desconozcamos) y quedamos libres de culpa al reconocer que nuestros pecados no eran sino errores, y al estar libres de culpa, nos liberamos del miedo, porque estamos a salvo.
Sesiones largas: ¿No vale la pena dedicar 5 minutos cada hora a aceptar la felicidad que Dios te dio? Esto garantiza tu liberación del dolor y del miedo, y una dicha que no es de este mundo. Hoy practicás con Dios mientras decís: "Aceptaré el papel que me corresponde en el Plan de Dios para la Salvación" Dios aceptará tus palabras y te las devolverá radiantes de fe y confianza. Ofrecele las palabras, Él hará el resto.
Pasá cada hora preparándote para la próxima sesión en que te reunirás con Dios. Repetí la idea a menudo; cada vez que lo hacés, preparás tu mente para el feliz reencuentro.

Lección 99 : "La Salvación es mi única función aquí"
La salvación y el perdón son lo mismo. Ambos implican que algo anda mal, y precisa ser corregido, pero sólo son ilusiones irreales. Sin embargo, al haber creído en su existencia, nuestra mente precisa un plan, un pensamiento de Dios para pasar por alto lo que nunca ocurrió. El Espíritu Santo conserva ese plan en la mente de Dios y en la tuya, para recordarte que Dios es Amor y que todo lo que se oponga a esta idea no es Su voluntad.
El pensamiento cuya función es salvarte de todas las apariencias: "La Salvación es mi única función aquí. Dios sigue siendo Amor, y esto no es Su Voluntad"
Sesiones largas: Practicá con el pensamiento de Dios. Comenzá diciendo: "La Salvación es mi única función aquí. La salvación y el perdón son lo mismo." Pedí luego aprender lo que necesitás para dejar de lado el miedo y reconocer a tu Ser. Perdoná todo pensamiento que se oponga a la verdad de tu compleción, unidad y paz. No podés perder estos regalos que tu Padre te dio.
Sesiones cortas: repetí frecuentemente la idea de hoy durante el transcurso de la hora. Así, depositás el perdón en tu mente, y dejás que todo temor sea suavemente descartado, para que el amor pueda ocupar su lugar en vos y mostrarte que sos el Hijo de Dios.

Lección 100 : "Mi papel en el plan de salvación de Dios es esencial"
Igual que el Hijo de Dios completa al Padre, tu papel en Su plan lo completa. La salvación tiene que revertir la descabellada idea de pensamientos y cuerpos separados, que viven vidas separadas y recorren caminos separados. Cuando mentes separadas comparten una función, se unen en un solo propósito. Cada una es igual a las demás
La voluntad de Dios para vos es perfecta felicidad. ¿Por qué habrías de querer contradecirle? Tu papel es tan esencial para el Plan como para tu felicidad. Y sin tu dicha, la dicha de Dios no es total; y nadie ríe porque toda risa no es sino el eco de la tuya. Los mensajeros de Dios rebosan de felicidad; su júbilo sana todo pesar y desesperación.
Hoy no permitiremos que la tristeza se abata sobre nosotros. Trataremos de comprender que la dicha es nuestra función. Hoy sos el mensajerUo de Dios, que brinda Su felicidad a todos y Su paz a los que te contemplan, pleno de felicidad.
Sesiones largas: Repetí la idea de hoy, dejando que por 5 minutos la felicidad brote de vos tal como es la voluntad de Dios y la tuya. Comprendé que tu papel es ser feliz. Es lo único que se te pide. Es un error creer que se te pide sacrificio. Tratá de encontrar la dicha que te demuestra a vos y al mundo, lo que la Voluntad de Dios dispone para sus Hijos. Tu función es encontrarla aquí y ahora. ¡Ojalà lo logres hoy, a medida que ascendés para hallar el Cristo en vos!
Sesiones cortas: Recordá la idea de hoy entre las sesiones largas de cada hora. Es tu Ser el que te llama hoy, tenés que encontrar la felicidad que tiene para vos, para poder darla.